sábado, 25 de julio de 2009

The Past Returns(Part.1)

Observando de nuevo mi móvil, vi como tenía muchas llamadas y mensajes. Las llamadas debí haberlo supuesto, eran de mi madre, seguramente ya habría llamado a la policía y hubiera denunciado mi desaparición, era demasiado previsible. Sin embargo, los mensajes no sabía de quien eran, me llevé una gran sorpresa cuando leí el nombre de quien los enviaba: Miriam. A pesar de todo lo que la había hecho, quería saber algo de mí. Estaba realmente feliz, aunque a la vez triste al leer aquellos mensajes, estaba preocupada. Todos los mensajes eran iguales, preguntaba que dónde estaba, que la llamara… pero hubo un mensaje que me llamó la atención, me asustó:


“Al, vuelve, tengo miedo, creo que... me quieren matar”.


A partir de ese mensaje, todos volvían a ser iguales

Hachiko, que ahora iba junto a su padre, supo de alguna manera que yo no les estaba siguiendo. Padre e hija se pararon, unote ellos vino hacia mí, era Hachiko, su forma de caminar era inconfundible. Me pasó la mano por el hombro tratando de consolarme aunque no sabía que me pasaba. Yo, ahora que tenía el rostro hundido entre mis manos, sentí que debía volver con ella pero ¿y David? Debía elegir a quien quería salvar. Hachiko me retiró las manos de la cara.

-¿Qué ocurre?

-Miriam… van detrás de ella, la quieren matar.

-¿Cómo sabes eso?- preguntó James acercándose rápidamente.

Le enseñé los mensajes queme había enviado Miriam.

-Marluxia- susurró.

A pesar de lo bajo que lo dijo fui capaz de escucharle, aun no entendía que tenía esa mujer contra mí, no la había hecho nada. Cerré las manos con fuerza mientras me mordía el labio inferior, la furia, el odio que sentía por dentro… hicieron que Hachiko se alejara de mí. No la iba a hacer nada, yo no era una persona agresiva, solamente tenía ganas de gritar. James se acercó un poco más hacia mí.

-Estará bien no te preocupes, siempre hace lo mismo. No la hará nada, confía en mí.

Quería creerle pero… me resultaba muy difícil. Ella era muy poderosa, y quizás para hacernos escarmentar… no, no debía pensar eso, tenía que creer a James, al fin y al cabo él era la persona que mejor la conocía.

Recordé entonces las llamadas de mi madre, por Miriam no podíamos hacer nada de momento, pero a mi madre podía tranquilizarla con una simple llamada. Dieron varios tonos pero no lo cogió, supuse que cuando viera mi llamada me llamaría.

No me sentía bien, así que me senté en el suelo con la cabeza hundida en las piernas. Hachiko se sentó a mi lado mientras James iba a por un poco de agua.

-¿Aun la quieres?

-¿Cómo lo…?- comencé a decir, pero no me dejó acabar.

-Me lo contó mi padre.

-Oh… bueno creo que parece obvio que sí.

-Ya verás como no le ha pasado nada-dijo con una amplia sonrisa.

-Eso espero.

En ese momento llegó James con agua fría, cuando fui a levantarme para cogerla Hachiko me lo impidió. Cuando la miré ésta negó con la cabeza, cogió ella el frasco y me lo entregó. Bebí un trago largo de agua y me eché un poco por la nuca y por la frente, después de esto me sentía algo mejor, lo suficiente como para continuar andando algunas horas más, pero al estar anocheciendo decidimos quedarnos allí hasta que amaneciera. Antes de dormirme apagué el móvil, tenía que proporcionar bien la batería por si me llamaba mi madre o tenía más noticias de Miriam.

Tal y como habíamos acordado al amanecer nos pusimos en marcha, esperaba que no tuviéramos ningún percance, aunque tal y como estaban las cosas estaba muy difícil.

Aquel día Hachiko y James no paraban de hablar, yo sin embargo, me puse a pensar en Jack ¿realmente era una mala persona? Recordé la conversación que tuvieron él y Marluxia, y en especial una frase:

“Como no lo cumplas, ya sabes lo que pasará”

Todavía no habíamos avanzado mucho, quizás un kilómetro, y esa duda me estaba matando por lo que decidí que debía averiguar que había pasado.

-¡Chicos esperad, volveré en seguida!-grité mientras corría en dirección contraria

-¿Dónde vas?-preguntó James asustado.

-¡No seas loca!-gritaron ambos

Cada vez corría más deprisa pero, no pude superar la velocidad de un vampiro.

-¿Dónde te crees que vas? Las cosas cada vez están más difíciles… podrían matarte.

-Me da igual, Jack no es malo, solamente estaba amenazado por Marluxia. Cuando les escuché Marluxia le dijo: “Como no lo cumplas, ya sabes lo que pasará”

Al escuchar esto James comprendió mi reacción, en cuanto llegó Hachiko nos fuimos los tres a la posada.

Cuando llegamos todo estaba exactamente igual, hasta Jack quien seguía encajado en la pared. James se acercó a él y le ofreció un poco de agua, estaba casi muerto. Una vez que vimos que al menos respiraba, James le sacó de aquel agujero y le echó en una cama. Jack aun estaba agonizando, el impacto debió haber sido tan fuerte que seguramente tendría algo roto, pero James no perdió ni un segundo en hacerle un interrogatorio.

-¿Con qué te ha amenazado Marluxia?

-¿Cómo lo…?

-No importa como lo sé, simplemente dilo.

-Mi familia… dijo que si os retenía aquí me la devolvería.

Todos mostrábamos cierto arrepentimiento por habernos comportado así, el sentimiento de culpabilidad se había hecho dueño de nosotros en aquel preciso momento, si hubiéramos estado en su lugar seguramente habríamos hecho lo mismo. Jack apenas podía respirar, no podía mantener los ojos abiertos. James miró a su hija y ésta colocó sus manos sobre el pecho de Jack, susurraba unas palabras que era incapaz de descifrar. Unos minutos más tarde, Jack abrió los ojos del todo y se incorporó, como si no le hubiera pasado nada. Al ver mi cara de sorpresa, James se acercó a mí y me susurró.

-Hachiko aprendió algo de magia cuando era pequeña.

Mirado a sus padres era normal, los dos eran unos poderosos archimagos, aunque al final tomaran caminos distintos. Jack estaba aun más sorprendido que yo, a pesar de haber tenido contacto con Marluxia parecía que jamás había visto hacer magia. Luego pensé que quizás no fuera tan raro, seguramente no le mostró su poder. Jack se tocó el pecho asustado.

-¿Qué ha pasado?-dijo temblando de terror.

-En pocas palabras… te he curado-respondió Hachiko.

-¿Te vienes con nosotros? Recuperaremos a tu familia.-dijo James.

Jack miró a James con los ojos llenos de lágrimas y asintió. No sabíamos si serviría de algo, pero si James le había ofrecido venirse con nosotros sería por algo. Sin demorarnos demasiado salimos de la posada de nuevo. Jack nos contó como Marluxia llegó y se llevó a su familia, tal y como lo contó fue realmente trágico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario