martes, 3 de noviembre de 2009

Reik’s Castle: 1st Floor (Part.2)

Un chico pelirrojo apareció de la puerta del medio. Llevaba puesta una camiseta negra de manga corta y unos pantalones verdes anchos, su particularidad era que iba descalzo pero sino, parecía un adolescente normal y corriente. Fue acercándose a mí con pasos silenciosos y elegantes, era realmente agradable verle andar de esa manera. Mientras le miraba, James apareció a mi lado.
-Cuanto tiempo, Kyo- dijo James mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro. Era la primera sonrisa que mostraba desde hacía tiempo.
-Demasiado diría yo-contestó el chico.
Me mantuve callada mirando a aquellos dos, pero de vez en cuando mi vista se desviaba a Hachiko, todavía no estaba segura del todo de que no me fuera a atacar y muchas preguntas abrumaban mi cabeza. ¿Por qué ahora era un perro? Era preciosa, no lo podía negar, un Hasky, pero había intentado matarme y… hacía unos minutos era una humana.
El muchacho que acababa de llegar me miraba de arriba abajo, casi sin pestañear. El color de mi cara comenzó a cambiar a un tono más rojizo, me sentía incómoda al sentir aquellos ojos marrones tan profundos observándome, como si quisiera descubrir todos mis defectos. James sonrió.
-Es una amiga de David, fue ella la que se puso en contacto con él, su nombre es Al.
-¿Nos servirá de ayuda?
-Por supuesto ¿a caso crees que la hubiera traído si no tuviera posibilidades de sobrevivir?
En aquel momento me sentí como un objeto que podían utilizar a su antojo. Mi rubor desapareció y miré a Kyo. Sus ojos tenían algo que les hacía irresistibles, pero parecía tener muy mal humor, era demasiado serio para lo joven que parecía. Pasó por mi lado, esta vez sin mirarme, y fue directo a las escaleras pero nosotros no nos movimos, ni si quiera Hachiko quien permanecía tumbada a mi lado. James observaba los pasos de Kyo, sus ojos decían que quería seguirle, sin embargo seguía sin moverse.
-¿No venís?-preguntó Kyo- pues así difícilmente le vais a salvar.
A raíz de estas palabras James avanzó de manera acelerada, Hachiko y yo nos quedamos atrás, pero no por mucho tiempo, alcanzamos a James y a Kyo en seguida. Kyo daba autentico terror con algunos gestos.
Los escalones de piedra eran bastante grandes, tanto de largo como de ancho, cabían varias personas en un mismo escalón.
-Bueno, al menos esto es fácil, cansado, pero fácil-comenté.
-No creas que va a ser tan fácil-dijo Kyo mirándome con cierta hostilidad.
Kyo encabezaba nuestro grupo subiendo él primero los escalones, intenté seguirle pero James me lo impidió. Me quedé donde estaba mientras Kyo seguía subiendo. Subía los escalones con lentitud, primero ponía un pie asegurándose que no había peligro. Al pisar uno de los escalones, una llamarada salió de la pared. Mis ojos miraron aquella llamarada con terror, podría haber carbonizado a Kyo, el cual miraba al fuego con frialdad. James, el cual no se había movido de donde estaba, ahora subía los escalones rápidamente hasta ponerse al lado de Kyo, pronunció un hechizo y el fuego se congeló. Kyo volvió a pisar el escalón y otra llamarada apareció haciendo que el bloque de hielo se deshiciera.
-Son más listos de lo que creía-dijo Kyo-pero yo lo soy más. James, hazlo de nuevo.
-Espera-se dio la vuelta- Al, Hachiko, venid.
No hizo falta que la agarrara, comencé a andar y ella me seguía. Nos pusimos detrás de James, quien pronunció de nuevo el hechizo. Al igual que la vez anterior, un bloque de hielo sustituyó al fuego.
-Al-dijo Kyo-¿puedes pasar por encima del hielo?
-Creo que sí.
Me puse delante de todos y comencé a subirme en el hielo. Fue complicado, las extremidades se me escurrían ahí encima y las manos me ardían pero finalmente pude pasar. Uno por uno fueron pasando de la misma manera que yo pero cuando llegó el turno de Hachiko, hubo un problema. Sus pezuñas se escurrían en el hielo y no conseguía pasar, afortunadamente tuve una idea.
-Hachiko, pisa el escalón y salta por encima del fuego-grité.
Me obedeció inmediatamente y funcionó, de nuevo el grupo estaba junto. James y Kyo me miraban atónitos, había sido yo la que había tenido la gran idea. James se acercó a mí y me felicitó, sin embargo Kyo se quedó donde estaba.
-Solo ha sido suerte-dijo al fin.
-Vamos Kyo no seas tan terco, ha sido más lista que nosotros, reconócelo.
Kyo no dijo nada, siguió subiendo escalones al mismo ritmo de antes, mientras nosotros esperábamos a que nos diera una señal para que pudiéramos continuar. Finalmente encontró otra trampa, no había escalón sino una barra por la que teníamos que pasar. Uno por uno, fuimos pasando por la barra amarrándonos a ella excepto Hachiko que dio otro gran salto. Continuamos subiendo del mismo modo durante un buen tiempo, a pesar de lo que subiéramos seguíamos sin ver el final. Estaba agotada pero preferí no decir nada, llevábamos demasiado tiempo deseando llegar al castillo de Reik como para que ahora quisiera descansar. Cuantos más escalones subíamos, más pesados se me hacía subirlos. James me miraba continuamente, a él no podía engañarle, llevábamos demasiado tiempo viajando juntos.
-Kyo ¿podemos parar un poco?-preguntó- Al debe estar cansada.
-Como queráis, a mi me da igual, yo no estoy cansado-contestó con indiferencia.
-No hace falta, aun puedo continuar andando- mentí.
-Al, sabes que eso no es verdad, pero bueno eres tu la que eliges.

No hay comentarios:

Publicar un comentario